Corría el año 1999, año de mundial. Pero esta vez con una diferencía importante: España se había clasificado por primera vez en su historia para esta cita. Esta edicion del «RWC» iba ser organizada en su casi totalidad en Gales, y Australia fue por segunda vez la alzadora de la Copa Webb Ellis, ganando a Francia en la final por 35 a 12. Uno de los aspectos más conflictivos y novedosos fue que en esta edición se decidió ampliar la partipación de las selecciones de 16 a 20. algo que claramente benefició a España. Como no podía ser de otra forma, los leones entraban en el mundial con la etiqueta de «cenicienta» y no tardó en perder su primer partido de grupo ante otra de las selecciones menos importantes del rugby mundial: Uruguay.
Pero llegaba el 10 de Octubre, cita histórica, día que pasó a la historia del rugby del león. España se enfrentaba a Sudáfrica, la poderosa y vigente campeona del torneo, un partido que ya antes de ser disputado tenía una historia y que cuando acabó, descifró otra. No, no os voy a engañar a los que no conoceís el desenlace, España perdió, pero jugo un partido memorable, un partido ya caliente de desde el principio por la declaraciones del entrenador sudafricano, Nick Mallet , un partido desvirtuado por las grandes ausencias de los «springboks» debido a la infravaloración del choque llevado a cabo por su director técnico, pero un partido donde los españoles tiraron de riñon y heroica, ofreciendonos un acto que quedará en nuestra retina para siempre.
Hace tiempo que volvía a vivir este partido en unas grabaciones que encontré. La vida me las ha vuelto a esconder, pero aparecerán. De momento me queda el sabor de haberlo visto sucesivas veces y la esperanza que algún día aparezca ese VHS por alguna de las cajas del trastero, espero que sigan vendiendo reproductores por entonces…..
Así nos lo contó Diego Armero para EL MUNDO el día del histórico partido:
Sudáfrica busca una «paliza» histórica frente a España
«Estoy seguro de que lograremos la mayor paliza de la historia», manifestó el jueves pasado Nick Mallet, entrenador de los springboks, la selección de Sudáfrica de rugby, actuales campeones del mundo. Su arrogante reto: superar el abultado récord de 145 a 7 que logró Nueva Zelanda contra Japón en el último Mundial.
Su cita: esta tarde (18.00 horas, La 2) en un histórico estadio de Edimburgo, Murrayfield, que destila el aroma del rugby más genuino, en la liguilla de cuartos de final del Mundial de 1999 que se disputa en distintos estadios de Gran Bretaña y Francia. Su rival: España.
Es un duelo injusto, un enfrentamiento irreal. La todopoderosa Sudáfrica frente a la débil España. Sobre el campo de Murrayfield, 15 contra 15, pero en realidad se miden dos polos opuestos. «Esto es como si la selección española de fútbol se enfrentara a un equipo de juveniles», confesó ayer a EL MUNDO Alfonso Feijoo, el seleccionador español.
Abunda la estadística de la desigualdad: una selección favorita para el título final frente a un equipo que no gana un solo partido desde hace 16 meses.
Serán 15 profesional frente a 15 amateurs («Tenemos desde leñadores [Astarloa] hasta funcionarios [Carlos Souto]», afirma Feijoo); en Sudáfrica, hay un federado en rugby por cada 167 habitantes, mientras que en España hay uno por cada 7.500; el presupuesto de la Federación sudafricana ronda los 1.000 millones de pesetas, por sólo 160 el de la española; y las estrellas rivales cobran una media de 100 millones de pesetas al año, pero los españoles sólo una beca de 1,2 millones («Contando el tiempo que están concentrados, sólo sale a 125 pesetas la hora», bromea el técnico).
Discusión.- Y se cruzan declaraciones antagónicas. «Fue un error ampliar el Mundial de 16 a 20 equipos. Equipos como España no deberían estar aquí», apuntó ayer Mallet, que alineará a 14 suplentes y un solo titular. «Firmo una derrota por 30 a 7. Es imposible ganar, pero en la actitud de mis jugadores, encontraré una victoria», asegura Feijoo, que fue internacional en 23 ocasiones como jugador.
Hace sólo ocho días, en el debut de España en un Mundial, la selección fue derrotada por Uruguay (27 a 15) y se cuestionó la decisión del seleccionador nacional de dejar fuera del equipo a los pilieres Asier Altuna y Jonadab Díaz, ambos jugadores de Primera División en Francia y Nueva Zelanda.
«Acepto todas las críticas. Y podía haber traído un equipo de extranjeros con el que estoy seguro que habríamos ganado a Uruguay, pero preferí traer a españoles», afirmó Feijoo, que sigue contando con un jugador tonguiano que vive desde hace varios años en España, Steve Tuineau, un francés de padres españoles que apenas habla castellano, Sébastian Loubsens, y un ucraniano que recibirá pronto el pasaporte español, Andrei Kovalenco.
Este último jugador es uno de los que se han beneficiado del atípico reglamento de la Federación Internacional de Rugby, que permite que cualquier selección cuente con jugadores de otras nacionalidades que hayan jugado un mínimo de tres años en su país («En el último Mundial, la selección de Japón se presentó llena de neozelandeses», comenta Feijoo).
El ucraniano, de 28 años, es uno de los hombres más destacados del equipo, junto al capitán, Alberto Malo. «Vine a España hace seis años de gira con la selección ucraniana y el Canoe me ofreció quedarme y no lo dudé», afirma Kovalenco, que trabaja como traductor de ruso en la sede del PP.
Una vez que España termine su andadura en este Mundial (el próximo día 16 todavía tiene que enfrentarse a Escocia), el rugby regresara al anonimato. «El problema, es que, en los colegios, no se enseña a jugar a este deporte y, por eso, a los jugadores le falta técnica y ritmo de competición», afirma Feijoo.»
España perdió todos sus encuentros en este muldial «histórico» para el rugby nacional, pero lo que si quedó claro es que los leones hicieron callar al entrenador «springbok» aguantando estoícamente en defensa y salvando un más que digno resultado final de 47-3 Final. Esta fue la alineación del «XV del León» :
Grupo A:
Sudáfrica, Escocia, Uruguay y España
Partidos de España:
Uruguay 27 – España 15 : 2 de Octubre de 1999 – Netherdale, Galashiels. Anotó por España: 5 golpes de castigo Andrei Kovalenco.
Sudáfrica 47 – España 3 : 10 de Octubre de 1999 – Murrayfield, Edinburgh. Anotó por España: 1 golpe de castigo Ferrán Velazco Querol.
Escocia 48 – España 0 : 16 de Octubre de 1999 – Murrayfield, Edinburgh.
Convocatoria: Aratz Gallastegui, Jaime Alonso, Andrei Kovalenco, Aitor Etxeberría, Alvar Enciso, Fernando Díez, Raphaël Bastide, Alberto Socias, Sebastien Loubsens, Oriol Ripol, Antonio Socias, José Ignacio Inchausti, Angel Frechilla, Ferran Velazco Querol, Francisco Puertas Soto, Jordi Camps, José Ignacio Zapatero, Víctor Torres, Luis Javier Martinez, Fernando De La Calle, Diego Zarzosa, José Miguel Villaú, Steve Tuineau, Sergio Souto, Alberto Malo (c), Carlos Souto, Oscar Astarloa, José Díaz, Agustín Malet, Alfonso Mata. Entrenador: Alfonso Feijoo.
Aqui os dejo una serie de videos que he encontrado, escasos en cantidad y tiempo, pero dan una pequeña idea de lo vivido:
En este artículo de la IRB, tambien se hacen eco de este histórico hecho del rugby: